Ahora somos nosotros, la Comunidad Cristiana, quienes sentimos la aprieto de hacer realidad el Evangelio y de construir el Reino que Él inauguró. Contamos con su presencia en medio de nosotros y con la fuerza de su Espíritu.No te pido que los saques del mundo, sino que los libres del mal. Ellos no son del mundo, como ni yo soy del mundo.2«Sabé